Una vez que una rata ha visitado nuestro saco de grano, podemos contar con que volverá


En la década de 1920, cuando Edwin Guthrie, paso ocuparse de la psicología, el modelo de aprendizaje por estimulo y respuestas era el fundamento de casi todas las teorías conductistas. Derivado de la ideas de condicionamiento clásico de Pavlov, este modelo suponía que exponer a los sujetos repetidamente a ciertas combinaciones de estímulos acababa por suscitar repuestas condicionadas.

Aunque Guthire era un conductista estricto, no estaba de acuerdo con que el condicionamiento necesitara refuerzos para ser eficaz; consideraba que la asociación entre estimulo y respuesta es completa desde la primera vez que se combinan. Su tesis se basaba en un estudio en el que había observado a gatos atrapados en cajas-problemas. Una vez descubierto el procedimiento para escapar, los gatos asociaban la escapatoria con dicho procedimiento, y lo repetían. De igual modo, según Guthrie, una vez que una rata ha localizado una fuente de alimentos, sabe adónde ir cuando tiene hambre.

Guthrie amplió su idea en la teoría de la contigüidad, según la cual una ambientación de estímulos que ha acompañado a un movimiento, al repetirse tendrá a ser seguida por tal movimiento. Es un movimiento, no una conducta, lo que se aprende de la asociación de estimulo y respuesta. Los movimientos relacionados se combinan para formar una acción; la petición no refuerza la asociación sino que conduce a la formación de acciones, que se combina para configurar la conducta. 

 

This free website was made using Yola.

No HTML skills required. Build your website in minutes.

Go to www.yola.com and sign up today!

Make a free website with Yola